Migrantes, víctimas del sistema excluyente

Tres menores de edad quedaron huérfanos de padre; perdió la vida en su intento por cruzar la frontera.
Finalmente, el periódico San Antonio Newspaper le solicito respetuosamente al Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, a través del Canciller de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray Caso que le hiciera del conocimiento de este asunto a Josefina Eugenia Vazquez Mota, ya que recibió alrededor de más de mil millones de pesos, para supuestamente auxiliar a los mexicanos en Norteamérica, de manos de Peña Nieto;
Por Agencia de Noticias DSM
ORIZABA, VERACRUZ.- Tres pequeños menores de edad han quedado huérfanos de padre al intentar Pedro Antonio García Tenorio de veintiocho años de edad, cruzar la frontera que divide a México de los Estados Unidos de Norteamérica.
Su sueño de ir a ganar dólares al Norte no fue posible. Según datos de su joven esposa, Esperanza Verónica García Hernández, su esposo fue tras su sueño de ganar dólares el pasado veintidós de enero, sin embargo, por reportes de sus compañeros con quienes intentó cruzar la frontera, se supo que pasó, pero en las innumerables redadas para “cazar a los migrantes” en ese disturbio y momentos críticos, al parecer, perdió la vida.
Esperanza Verónica García, comentó que recibió la información que a su esposo lo encontraron sin vida el pasado dos de febrero, de esa fecha hasta la publicación de esta nota periodística las autoridades como el Consulado Mexicano en Los Ángeles California no han dado respuesta concreta a la repatriación del cuerpo sin vida de Pedro Antonio García Tenorio.
Inclusive, la viuda expresó que efectivamente ella había hecho todo lo posible por monitorear la ubicación de su esposo y saber si estaba con vida o había muerto en su intento al cruzar la frontera. Personal del Consulado Mexicano ubicado en el lugar ubicado como Caléxico le solicitó documentación tanto de ella como de su esposo, lo cual de inmediato ella envió vía correo electrónico, después esas mismas personas prometieron repatriar el cuerpo de tal manera que éste llegaría a territorio mexicano el pasado siete u ocho de febrero, promesa que no ha sido cumplida.
Según datos proporcionados por “el Operador número 32” (así es como son identificados la mayoría de los servidores públicos que trabajan en la Secretaría de Relaciones Exteriores de México en territorio Norteamericano) efectivamente había sido reportado “la muerte” de Pedro Antonio García Tenorio.
El Operador número 32 afirmó que había sido confirmado el dato porque en el reporte (en el sistema de migración) están incluidas las identificaciones de Pedro Antonio García Hernández, sin embargo, el mismo Operador dijo desconocer la ubicación del cuerpo físicamente por lo que sería hasta el día miércoles veintiocho de febrero cuando se pondrían nuevamente en comunicación con la esposa.
Esperanza Verónica García, dijo sentirse desconsolada y con mucho dolor por la desafortunada noticia de que su esposo perdió la vida en el intento de cruzar la frontera hacia Norteamérica, sin embargo, también tiene la preocupación de mantener a sus tres menores hijos, ya que la ilusión de su esposo por trabajar de indocumentado para enviar a México lo poco que ganara se frustró. Ahora ella será una mexicana más que será padre y madre para sus hijos que han quedado huérfanos, porque en el municipio de Mariano Escobedo en el estado de Veracruz, México, hay nulas oportunidades de trabajo y de desarrollo, solo hay pobreza y demasiadas limitaciones por donde vivimos, expresó con harto llanto la viuda.
Finalmente, el periódico San Antonio Newspaper le solicito respetuosamente al Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, a través del Canciller de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray Caso que le hiciera del conocimiento de este asunto a Josefina Eugenia Vazquez Mota, ya que recibió alrededor de más de mil millones de pesos, para supuestamente auxiliar a los mexicanos en Norteamérica, de manos de Peña Nieto; así como el de Humberto Ascensión de los Santos que está preso actualmente en Florence, Arizona y de la viuda, campesina, indígena Graciela Cruz Posadas, de Capuluaque, Puebla, quien luego de que falleció su esposo en Nuevo México en septiembre 23, 2013 a la fecha no le ha informado el gobierno mexicano sobre las causas que originaron su muerte y la entrega de las pertenencias de su esposo