La bestia

Que termine el reino del rey de tinieblas, y Jehová glorioso reine en esta tierra.
Por Mariana Curiel
Y la bestia ruge sedienta de sangre.
El inocente cae entre lodo y hambre.
Y la bestia ruge, su aliento es podrido
Como los gobiernos que al mundo han regido.

Mariana Curiel interpretando la felicidad dirigida a los esclavistas de la raza africana. Fotografía de Jorge Mendoza Arroyo. San Antonio Newspaper © 2016
Y la bestia ruge, tiemblan los humanos
Porque por la bestia, muchos claudicaron,
Oro, placer y poder, los hombres le piden
A este infame ser.
Y entregan sus almas sin temor a Dios,
Que es quien nos ha hecho, es nuestro creador.
Pobres de las almas que a Dios no conocen.
Están extraviadas, no saben su nombre.
Y la bestia reina, su tiempo se acaba,
Y arrastra en sus garras a millones de almas.
Que termine el reino del rey de tinieblas
Y Jehová glorioso reine en esta tierra.